¿Y tú que sabes de dislexia?

Seguro que todos hemos oído alguna vez la palabra “dislexia” y lo asimilaremos a “la persona que confunde las letras cuando lee o escribe”. Pues es correcto, pero no del todo, ya que una persona con este problema no se caracteriza solo por esta dificultad, entre ellas tenemos una lenta velocidad de procesamiento, dificultad para planificar actividades, dificultades para el aprendizaje matemático, dificultad con la ortografía, para seguir instrucciones orales, baja comprensión de la lectura...

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Hemos de saber que este problema del aprendizaje hoy en día está muy presente, tanto es que 1 de cada 10 niños/as de una clase lo presentan, por ello es esencial que tanto los docentes como las familias conozcamos cuales son las dificultades derivadas y cómo podemos ayudarlos para mejorar su rendimiento, motivándolos a mejorar a la vez que aumentamos su autoestima, pues los niños con dislexia suelen ser emocionalmente sensibles.

Entre los signos de alarma podemos encontrar:

• Antedecentes familiares
• Confusión en la pronunciacion de palabras con fonética parecida.

¿Pero por qué se da este problema?

La dislexia es un trastorno específico de origen  neurobiológico y según el DSM-V es un trastorno especifico del aprendizaje. Así mismo, no puede ser explicado por otro problema, como visual;  y las personas que lo padecen  tienen un CI normal. 

En primer lugar debemos saber que el cerebro de una persona con dislexia es totalmente diferente al de una persona sin dislexia, pues los primeros presentan sus circuitos neuronales desordenados provocando así las dificultades que presentan, además de haber una disminución de la sustancia gris en el tálamo, cerebelo y lóbulo frontal tanto derecho e izquierdo. 

Es en el hemisferio izquierdo donde se almacena los circuitos neuronales encargados de la lectura y el lenguaje, por lo que el alumnado normotípico utiliza el hemisferio izquierdo en tareas de lectura. Sin embargo, según estudios, el alumnado con  dislexia utilizan el hemisferio derecho, en concreto el lóbulo frontal, por lo que el recorrido para llegar al hemisferio izquierdo,  descodificar palabras y comprenderla es mas largo, aumentando así su velocidad de procesamiento y tardando más en la lectura y comprensión que un niño sin dislexia. 

Se conoce además que en la dislexia interviene diferentes áreas cerebrales como son:

• Frontal inferior: donde se produce la articulación de las palabras
• Parieto-temporal: se encuentran las representaciones fonologicas
• Temporo-occipital: almacenan representaciones ortográficas. 

Asimismo existen diferentes habilidades cognitivas afectadas debido a la dislexia, principalmente la memoria (memoria de trabajo) y la atención. 

Detección y diagnóstico

No es hasta los 8-9 años cuando se puede diagnosticar la dislexia, ya que debe presentar un desfase de lectura de dos años como mínimo. Entre las pruebas utilizadas para la detección esta el WISC, ITPA, PROLEC... Cabe destacar que su detección y diagnóstico temprano es esencial para empezar cuanto antes una intervención sobre las habilidades cognitivas afectadas, mejorando su rendimiento escolar, evitando así desfase curricular. 

La intervención es multidisciplinar entre psicólogos y logopedas, en consonancia con los docentes y las familias, pues juegan un papel importante en este proceso. 

Por otro lado, en cuanto a la tarea del docente como el alumnado con dislexia pueden:

• Dar instrucciones
• Poner ejemplos específicos.
• Dar más tiempo en los exámenes .
• Repetir lo que se diga
• Proporcionar la información por diversos canales mutisensoriales: visual, auditivo.. 

En esta ocasión para poder profundizar sobre esta temática he realizado un curso en la plataforma “Scolartic” dirigida en mayor parte a los docentes, y ofrece una gran variedad de cursos sobre tipos de aprendizaje que se pueden realizar en el aula, como abordar dificultades de aprendizaje… Una de las grandes ventajas que presenta es que los cursos son gratuitos, suelen ser de corta duración y todos son online, por lo que cada uno puede hacerlos a su ritmo teniendo en cuenta que hay una fecha límite de realización de los cursos. Estos cursos se realizan mediante vídeos explicativos y en algunos propone actividades a realizar y en otros simplemente al final de cada módulo se debe realizar unos test para pasar al siguiente nivel.  Al acabar el curso se proporciona un certificado de realización y una insignia sobre el curso.

En mi opinión ha sido un curso muy satisfactorio, que ofrece una visión amplia sobre los problemas que presenta el alumnado con dislexia, tanto a nivel general como específico en cada área de conocimiento. El origen del problema y como desde el ámbito docente podemos tratar estas dificultades ofreciendo pautas y consejos. 

Saludos.